domingo, 28 de mayo de 2017

Lecturas de mayo - 2017



El primer apóstol de James Becker

Un libro que me recomendaron mientras miraba (¡cómo no!), libros de segunda mano.
Estuve dudando si fiarme porque ya me pasó que me recomendaron uno, también de un puesto así, y resultó ser un rollo.
Pero al final decidí "arriesgarme" y darle una oportunidad.
De intriga hasta el final, no me ha defraudado.
Trata de que tras la muerte de una mujer, su marido y el amigo de éste investigan sobre lo que ha podido ocurrir, ya que parece ser que el mismo día de su muerte (supuestamente por accidente), alguien ha entrado en la casa pero sin llegar a robar nada.
Y el motivo por el que han entrado es buscando una antigua inscripción.
Tanto los que entraron en la casa como el marido y el amigo irán buscando pistas sobre lo que esconde dicha inscripción.
Un misterioso secreto que puede resultar mortal para quienes lo descubran.

Epidemia de Robin Cook

Creo que ya lo he comentado, pero de este escrito he leído ya unas cuantas de sus novelas y todas me han gustado.
Y esta también.
Melissa, su protagonista, y el CEE (Centro para el control de enfermedades) al que pertenece, tendrán que enfrentarse a algunos brotes de ébola que irán apareciendo en distintas ciudades de EEUU.
Pero tratándose de Cook un maestro en el suspense y las conspiraciones médicas, dichos brotes no son apariciones por pura naturaleza.
Un plan siniestro que pone en riesgo muchas vidas humanas y una protagonista valiente que no se rinde por descubrir la verdad, hacen que la lectura sea una intriga constante.

La Madre de Maximo Gorki

Este libro me lo regalaron y no tenía ni idea de qué trataba.
Lo empecé a leer en el día de la madre por su título y la verdad es que no está mal, pero no me engancha.
Lo leo solo a ratitos y aún no lo he terminado, aunque mi idea es no dejarlo sin terminar.

Dewey Lee Más Libros de Vicki Myron con Bret Witter

Basado en un hecho real.
Vicki Myron es una bibliotecaria de Iowa que encuentra un gatito anaranjado en el buzón de devoluciones para los libros.
A partir de ese día, el gatito pasa a formar parte del equipo de la biblioteca.
Y es que, salvo excepciones, todo el mundo está encantado con su compañía.
Dewey de nombre y Lee Más Libros de apellidos da, sin querer, publicidad a que se disparen las visitas a la biblioteca. Hasta de sitios tan inesperados como Japón.
Lo que es una grata sorpresa para todos los que trabajan en la biblioteca.
Dewey no solo encuentra un hogar en el que vivir feliz y protegido sino una gran familia.
Para Vicky, "su dueña" es más que un gato. Su relación de amor es algo que solo los que tenemos gatos podemos entender.
Emotivo y muy bien redactado, me ha gustado mucho.

martes, 2 de mayo de 2017

Nueva afición: colorear mandalas

Aunque es cierto que verlas ya las había visto, no fue hasta hace unos meses (igual ya casi un año...) que un compañero de trabajo me comentó sobre ellas y les puse "cara".
Por el nombre de mandalas, no sabía qué eran.
Y es que me comentó que, al colorearlas, te servían para relajarte.
Una mandala es: un término de origen sánscrito que significa diagramas o representaciones simbólicas bastante complejas. Utilizadas tanto en el budismo como en el hinduismo (definición sacada de una web).
Y la complejidad de estos dibujos hace que a la hora de colorearlos haya que estar concentrado si no queremos salirnos de la línea. Creo que lo que hace que esto resulte relajante es el hecho de concentrar todo el pensamiento en esta tarea y así evitamos darle vueltas a la cabeza.
¿Me funciona? Pues ciertamente mi cabeza no me hace caso y sigue a su rollo...
Bueno, algo si que me funciona.
Aún si no tiene efecto terapéutico para mí en ese sentido, colorear mandalas me entretiene y me gusta porque puedes utilizar muchos colores y eso me da alegría.
Despierta nuestro lado creativo y te hace volver un poco a la infancia cuando coloreabas.
Además, a mí que soy fan de las cosas de papelería, me sirvieron de excusa para comprar unos bolígrafos muy chulos que tienen la punta fina y que ayudan a que sea más fácil colorear las áreas pequeñas.
El primer cuaderno que me he comprado tiene como tema los ¡animales! Cómo no.



Cuando lo termine tengo pensado comprar otro con distintos motivos.
Eso sí, la idea no es ponerse a colorear como un loco para terminar un dibujo, sino hacerlo cuando estemos con ganas y parar si ya no estamos concentrados.
Porque sino en vez de relajarnos acabaría por ponernos de los nervios.
Como ahora ya hay más horas de luz también dan más ganas de ponerse a ello.
Yo con la luz artificial no me animo.
Hoy he empezado con un elefante que ya seguiré en otro momento. 
Y vosotros, ¿habéis probado a coloreárlas?

El primero que coloreé

Por ahora, mi preferido
En proceso